lunes, 24 de noviembre de 2008

Diego Guerrero: Un resumen completo de EL CAPITAL

Publicamos a continuación el libro de Diego Guerrero UN RESUMEN COMPLETO DE EL CAPITAL DE MARX. Es una edición revisada y ampliada por el propio autor, que acaba de ser publicada. Agradecemos al autor que nos lo haya enviado y no sólo no ponga pega alguna, sino que nos anime a su difusión.
SALUD

Decía su amigo Engels que Marx (1818-1883) fue ante todo un revolucionario. Y es cierto. Pero hay que añadir: un revolucionario muy especial. Por una parte, el socialismo y el comunismo son hoy y para siempre ideas inseparables del pensamiento de Marx, para quien “la emancipación de los trabajadores debe ser obra de los propios trabajadores”. Pero, por otra, Marx es un revolucionario muy especial porque, aunque su figura es inseparable de su actividad política práctica en el movimiento obrero y la I Internacional, además filosofó y analizó teóricamente las condiciones sociales de la revolución presente y, a nuestro juicio, lo hizo con más profundidad y visión que ningún otro pensador, obrero o no. Desde Marx sabemos por qué el capitalismo no puede ser eterno, por qué es el propio desarrollo de este sistema social lo que engendra el comunismo y por qué este cambiante estado de cosas no altera una verdad esencial: que mientras haya capitalismo surgirán, surgiremos, continuamente nuevos comunistas.

http://luxemburguismo.wordpress.com/files/2008/11/resumen-de-el-capital-diego-guerrero-octubre-20082.doc

domingo, 23 de noviembre de 2008

ETA asesina, ¿Por què? (E.T.A. assassine, pourquoi?)(1987) (de Bataille Socialiste)

Panfleto distribuido en junio de 1987 en España por el grupo de Grandizo Munis después de una matanza de ETA en un supermercado en Barcelona (21 muertos).

Debido a que aspira a monopolizar la explotación del proletariado vasco y convertirse en su opresor estatal.
Sus aliados políticos y sus patrocinadores financieros son las dictaduras islámicas, las de Khomeini y Gaddafi, entre otros.
ETA es una organización capitalista, patriótica, reaccionaria, por sus métodos es corrupta y criminal. Cada acción, cada palabra de ETA o cabeza de puente de Herri Batasuna, se opone a la lucha obrera y le perjudica, en la tierra vasca, España, Europa, en el mundo.
El proletariado es, por su propia esencia, anti-capitalista, internacionalista, revolucionario. Y ahora no puede caminar en esta dirección, la única que pertenece a él, sin denunciar a ETA, cuya estafa política, pringada de sangre palidece la vieja estafa de los presuntos socialistas o comunistas, sin hablar de los sindicatos.
Les denunciamos a todos ellos por lo que son, y todos en tanto que parcelas del mundo de la explotación. Trabajamos por la formación de un partido revolucionario de los explotados de toda la península. Sólo éste será capaz de restregar la nariz de ETA en su propia mierda, y librar el camino de otros fraudes, también enemigos de la revolución.
¡VIVA LA REVOLUCIÓN PROLETARIA IBÉRICA Y MUNDIAL!
Fermento Obrero Revolucionario

Tract distribué en juin 1987 en Espagne par le groupe de Grandizo Munis après un carnage de l’E.T.A. dans un supermarché de Barcelone (21 morts).

Parce qu’elle aspire à accaparer l’exploitation du prolétariat basque et à devenir son oppresseur étatique.

Ses alliés politiques et ses commanditeurs financiers sont les dictatures islamiques, celles de Khadafi et de Khomeiny entre autres.

L’ETA est une organisation capitaliste, patriotique, réactionnaire ; par ses méthodes elle est corrompue et criminelle. Toute action, toute parole de l’ETA ou de son fer de lance Herri Batasuna, s’oppose à la lutte ouvrière et lui porte préjudice, en terre basque, en Espagne, en Europe, dans le monde.

Le prolétariat est, de par son essence même, anticapitaliste, internationaliste, révolutionnaire. Et dans l’immédiat il ne peut pas marcher dans ce sens, le seul qui lui appartienne en propre, sans dénoncer l’ETA, dont l’escroquerie politique, dégoulinante de sang, blanchit la bien vieille escroquerie des prétendus socialistes ou communistes, sans parler des syndicats.

Dénonçons-les, chacun pour ce qu’il est, et tous en tant que parcelles du monde de l’exploitation.
Travaillons à la formation d’un parti révolutionnaire des exploités de toute la péninsule. Lui seul sera à même de rafraîchir les narines de l’ETA dans sa propre merde, et de débarasser le chemin des autres escroqueries, elles aussi ennemies de la révolution.

VIVE LA RÉVOLUTION PROLÉTARIENNE IBÉRIQUE ET MONDIALE !

juin 1987

Ferment Ouvrier Révolutionnaire.

domingo, 16 de noviembre de 2008

De la lectura y sus vicios (o del lector militante)

Artículo editorial tomado de la edición impresa de Diario El Telégrafo (Ecuador), del domingo 09 de noviembre del 2008

De la lectura y sus vicios (1)

Marcelo Medrano
Columnista
mmedranoh@hotmail. com


Buen día, amable lector. Mmm, ¿lector? Vaya inquietud con la cual amanezco: ¿hay lectores en este país?, ¿cuántos?, ¿dónde encontrarlos? Ya, ya, me dice, ya va usted a hacer preguntas raras: ¡claro que hay lectores!, con un relativamente bajo nivel de analfabetismo, las personas en su cromática variedad saben leer en este tricolor país. Las personas aprenden a leer desde cuando están en la escuela, ¿o no sabía usted eso?… ¡y viene a preguntarme, haciéndose el interesante, si la gente lee! Con esas ridículas preguntas, me está haciendo perder el tiempo de este domingo, ¡¡leyéndole!!

Intento reponerme de esa reprimenda llena de argumentos: si, en un país, millones de personas han cursado por la escuela y el colegio, ellas saben leer, y lo único que estoy haciendo es un escándalo. Un escándalo dominguero, que es peor. Pero, estimados lectores, si bien aprobar los cursos en el sistema educativo puede indicarnos que el prójimo sabe leer, ¿el saber leer garantiza que existan lectores? ¿Cuántos libros hemos leído en este año?, ¿al menos uno por mes?... ¿Vio? Y sigue con lo mismo: usted quiere convencernos que el lector es quien lee libros, y nada más. Sigue exagerando.

Permítame, y en esto me darán la razón los profesores de este país: cuando, en el colegio o universidad, el maestro plantea la lectura de un libro recibe preguntas de este tipo: ¿cuántas páginas tiene? (más de 20 páginas es un libro gigantesco), ¿con qué tamaño de letra está impreso el libro? (si el tamaño de letra es similar al de este editorial, la ceguera cunde y los dolores de cabeza y oculares se avizoran), ¿tiene gráficos, dibujos, imágenes?, ¿no? (y el libro se vuelve un campo gris lleno de obstáculos, y muy aburrido). Si tiene un índice de temas o capítulos: ¡es ‘un montón’!, y ¿hay que hacer resumen?, ¿acaso no confía en la lectura del alumno?; además, ¿usted cree que no tengo otras cosas más importantes por hacer?..., preguntas que se acompañan con una gestualidad de aversión en rostros y cuerpos. El profesor que no haya tenido tal bombardeo de argumentos, que lance la primera piedra, y el padre que no haya atravesado por esa situación que lo haga también. Y este es nuestro primer punto: hay que diferenciar una educación que cultive lectores de una educación que dé a la lectura la característica de ‘lectura de sobrevivencia’; es decir, una lectura que sirva únicamente para leer el horóscopo, tomar el bus o recibir mensajes de celular, para someterse a la publicidad, repasar los apuntes de las clases recibidas o devorar las revistas femeninas y del corazón, o las masculinas y deportivas, o las de farándula…

De allí, pasamos al segundo elemento: en colegios y universidades, ¿cuántos libros, aparte de artículos, revistas especializadas y periódicos, leen los alumnos?, ¿cuántos de aquellos libros son efectivamente leídos, trabajados, desmenuzados? , ¿acaso no se construyen hábitos, más que de lectura, de sobrevivencia ante las obligaciones académicas? Y, una pregunta más crítica todavía,… que la dejo para la próxima semana, estimado lector




Artículo editorial tomado de la edición impresa de Diario El Telégrafo, Ecuador, del domingo 16 de noviembre del 2008


De la lectura y sus vicios (2)
Marcelo Medrano
Columnista
mmedranoh@hotmail.com


No piense que le he esperado toda una semana por la segunda parte de su artículo; la verdad consiste en que soy generoso con usted y quiero leer la continuación de sus argumentos respecto a la lectura y los lectores: este noviembre me encuentra con gran generosidad para con el prójimo, incluido usted, estimado editorialista.

Nos había dicho -lo recuerdo- que el tipo de lectura que se enseña en colegios y universidades es una ‘lectura de sobrevivencia’; es decir, para los menesteres cotidianos de las clases y las revistas de farándula, para la publicidad, los celulares y un gran etcétera. Había también usted planteado que la lectura que desarrolla el alumno en esas universidades y colegios es, exclusivamente, una lectura para cumplir con las labores académicas, nada más. Pero, aunque diga eso, habría que preguntarles a los profesores qué opinan al respecto… ante lo cual, le respondo, estimado y paciencioso lector, que efectivamente hay que preguntarles a los profesores de escuelas, colegios y universidades, qué han leído en este último mes. Si los ve: ¡pregúnteles!: aparte de los memos y las evaluaciones, de los libros de grado o curso, y los eternos y amarillentos copiados, anímese a mirarles a los ojos para hacerles la pregunta de cuántos libros, el eminente y respetado profesor, ha leído en las últimas semanas. ¡¡Ufff, las sorpresas que se llevará!! Y anímese, y repita también esa inquietud dirigiéndola hacia las autoridades de esos centros educativos. Puede llevarse algunas sorpresas.

Jajaja, asústese usted, sorprendido lector, si, con franqueza y sabiduría y sapiencia, las autoridades o profesores le responden que han devorado toda la colección de Carlos Cuauhtémoc Sánchez, Paulo Coelho y especímenes similares, para dar solo un ejemplo. O ‘los hombres son de Marte y las mujeres son de otra parte’, o ‘alguien se ha robado mi queso’, mi celular o lo que sea… ¿Qué?, ¿le sucede algo?, ¿por qué se sonroja y baja la mirada?: ¡no me diga que usted ha sido ávido lector de esas inestimables joyas literarias!

Preocupante todo el asunto, ¿no le parece? Pero, quiero compartirle dos ideas: (1) el lector es alguien que se ejercita: de libros simples y accesibles debe proceder a enfrentarse a los complicados, largos, voluminosos: hay una voluntad de enfrentamiento, en ello reside la avidez de la lectura –después viene el disfrute; (2) el lector siempre es un ‘lector militante’: no puede dormir tranquilo si las librerías se llenan de libros del tipo ejemplificado arriba; no puede relajarse si sabe que los libros son la mercancía de valores estratosféricos; no descansa al saber que a sus hijos, nietos, vecinos e hijos de vecinos se les da a leer, en colegios y escuelas, basura pintoresca, pero basura al fin; se rasga la cabellera y las cejas al enterarse que los clásicos de la literatura, sociología y física, se eliminan del pénsum académico;…; en definitiva, el verdadero lector no duerme, tal vez descansa, porque, en el fondo, le enfada que un libro, al cual un posible lector no tiene acceso, se quede en solitario guardando sus palabras.

jueves, 13 de noviembre de 2008

Situación mundial: Como la crisis del 29, o más… Un nuevo contexto mundial

Situación mundial: Como la crisis del 29, o más… Un nuevo contexto mundial

Revista Herramienta
Herramienta Nº 39

François Chesnais* **

"La crisis va a desenvolverse de tal modo que las primeras y realmente brutales manifestaciones de la crisis climática mundial que hemos visto van a combinarse con la crisis del capital en cuanto tal"

La tesis que voy a presentar sostiene que el año pasado se produjo una verdadera ruptura que deja atrás una larga fase de expansión de la economía capitalista mundial; y que esa ruptura marcó el inició de un proceso de crisis con características que son comparables con la crisis de 1929, aunque se desarrollará en un contexto muy distinto.

Lo primero que hay que recordar es que la crisis de 1929 se desarrolló como un proceso: un proceso que tuvo comienzo en 1929, pero cuyo punto culminante se dio bastante después, en 1933, y que luego abrió paso a una larga fase de recesión. Digo esto para subrayar que, en mi opinión, estamos viviendo las primeras etapas, pero realmente las primeras, primerísimas etapas, de un proceso de esa amplitud y esa temporalidad. Y que lo que por estos días está ocurriendo y tiene como escenario los mercados financieros de Nueva York, de Londres y de otros grandes centros bursátiles, es solamente un aspecto -y tal vez no sea el aspecto mas importante- de un proceso que se debe interpretar como un proceso histórico.

Estamos frente a uno de esos momentos en los que la crisis viene a expresar los límites históricos del sistema capitalista. No se trata de alguna versión de la teoría de "la crisis final" del capitalismo o algo por el estilo. De lo que sí se trata, en mi opinión, es de entender que estamos enfrentados a una situación en la que se expresan estos límites históricos de la producción capitalista. Y aunque no quisiera aparecer como un Pastor con su Biblia marxista, quiero leerles un pasaje de El capital:

El verdadero límite de la producción capitalista es el mismo capital; es el hecho de que, en ella, son el capital y su propia valorización lo que constituye el punto de partida y la meta, el motivo y el fin de la producción; el hecho de que aquí la producción sólo es producción para el capi­tal y no, a la inversa, los medios de producción simples medios para ampliar cada vez más la estructura del proceso de vida de la sociedad de los productores. De aquí que los límites dentro de los cuales tiene que moverse la conservación y valorización del valor-capital, la cual descansa en la expropiación y depauperación de las grandes masas de los produc­tores, choquen constantemente con los métodos de producción que el capital se ve obligado a emplear para conseguir sus fines y que tienden al aumento ilimitado de la producción, a la producción por la producción misma, al desarrollo incondicional de las fuerzas sociales productivas del trabajo. El medio empleado -desarrollo incondicional de las fuerzas sociales productivas- choca constantemente con el fin perseguido, que es un fin limitado: la valorización del capital existente. Por consiguien­te, si el régimen capitalista de producción constituye un medio histórico para desarrollar la capacidad productiva material y crear el mercado mun­dial correspondiente, envuelve al propio tiempo una contradicción cons­tante entre esta misión histórica y las condiciones sociales de producción propias de este régimen. [1]

Bueno, seguramente hay algunas palabras que hoy ya no utilizaríamos, como esas de "misión histórica"... Pero creo que lo que iremos viendo en los años que vendrán, se dará precisamente sobre la base de que ya se ha creado en toda su plenitud ese mercado mundial intuido por Marx. Es decir, tenemos un mercado y una situación mundial diferentes a las de 1929, porque en ese entonces países como China y como India eran todavía semicoloniales, en tanto que ahora ya no tienen ese carácter; son grandes países que, más allá de que tengan un carácter combinado que requiere un cuidadoso análisis, son ahora partícipes de pleno derecho dentro de una economía mundial única, una economía mundial unificada en un grado desconocido hasta esta etapa de la historia. La cita puede ayudarnos a entender el momento actual y la crisis que se ha iniciado precisamente en este marco de un sólo mundo.



Un nuevo tipo de crisis

En mi opinión, en esta nueva etapa, la crisis va a desenvolverse de tal modo que las primeras y realmente brutales manifestaciones de la crisis climática mundial que hemos visto van a combinarse con la crisis del capital en cuanto tal. Entramos en una fase que plantea realmente una crisis de la humanidad, dentro de complejas relaciones en las que están también los acontecimientos bélicos, pero lo más importantes es que, incluso excluyendo el estallido de una guerra de gran amplitud que en el presente solo podría ser una guerra atómica, estamos enfrentados a un nuevo tipo de crisis, a una combinación de esta crisis económica que se ha iniciado con una situación en la cual la naturaleza, tratada sin la menor contemplación y golpeada por el hombre en el marco del capitalismo, reacciona ahora de forma brutal. Esto es algo casi excluido de nuestras discusiones, pero que va a imponerse como un hecho central.

Por ejemplo, muy recientemente, leyendo el trabajo de un sociólogo francés, me enteré de que los glaciares andinos de los que fluye el agua con que se abastecen La Paz y El Alto, están agotados en más de un 80% y se estima que dentro de quince años La Paz y El Alto ya no tendrán agua... y sin embargo, esto es algo que nunca se trató, nunca se discutió un hecho de tal magnitud que puede hacer que la lucha de clases en Bolivia, tal como la conocimos, se modifique sustancialmente, por ejemplo haciendo que el tan controvertido traslado de la capital a Sucre se imponga como algo "natural", porque se acabe el agua en La Paz.

Estamos entrando a un período de ese tipo y el problema es que casi no se habla de eso, mientras que en los ambientes revolucionarios se sigue discutiendo de cosas que en este momento resultan minucias, cuestiones completamente mezquinas en comparación con los desafíos a los que estamos enfrentados.

Límites inmanentes del capitalismo

Para seguir con la cuestión de los límites del capitalismo, quiero llamar la atención sobre una cita de Marx, inmediatamente anterior a la ya citada: "La producción capitalista aspira constantemente a superar estos límites inmanentes a ella, pero solo puede superarlos recurriendo a medios que vuelven a levantar ante ella estos mismos límites todavía con mayor fuerza".[2] Esta indicación nos introduce al análisis y a la discusión de los medios a los que se recurrió, durante los últimos treinta años, para superar los límites inmanentes del capital.

Esos medios han sido, en primer lugar, todo el proceso de liberalización de las finanzas, del comercio y de la inversión, todo el proceso de destrucción de las relaciones políticas surgidas a raíz de la crisis del 29 y de los años treinta, después de la Segunda Guerra Mundial y de las guerras de de liberación nacional... Todas esas relaciones, que expresaban la dominación del capital pero representaban al mismo tiempo formas de control parcial del mismo capital, fueron destrozadas y, por algún tiempo, al capital le pareció que con esto se superaban los límites puestos a su actuación.

La segunda forma que se eligió para superar esos límites inmanentes del capital ha sido recurrir, en una escala sin precedentes, a la creación de capital ficticio y de medios de crédito para ampliar una demanda insuficiente en el centro del sistema.

Y la tercera forma, la más importante históricamente para el capital, ha sido la reincorporación, en cuanto elementos plenos del sistema capitalista mundial, de la Unión Soviética y sus "satélites", y de China.

Sólo en el marco de las resultantes de estos tres procesos es posible captar la amplitud y la novedad de la crisis que se inicia.

Liberalización, mercado mundial, competencia…

Comencemos por interrogarnos sobre qué ha significado la liberalización y la desregulación llevadas a cabo a escala mundial, con la incorporación del antiguo "campo" soviético y la incorporación y modificación de las relaciones de producción en China... El proceso de liberalización y desreglamentación ha significado el desmantelamiento de los pocos elementos regulatorios que se habían construido en el marco internacional al salir de la Segunda Guerra Mundial, para entrar en un capitalismo totalmente desreglamentado. Y no sólo desreglamentado, sino también un capitalismo que ha creado realmente el mercado mundial en el pleno sentido del término, convirtiendo en realidad lo que era en Marx una intuición o anticipación. Puede ser útil precisar el concepto de mercado mundial e ir tal vez más allá de la palabra mercado. Se trata de la creación de un espacio libre de restricciones para las operaciones del capital, para producir y realizar plusvalía tomando este espacio como base y proceso de centralización de ganancias a escala verdaderamente internacional. Ese espacio abierto, no homogéneo pero con una reducción drástica de todos los obstáculos a la movilidad del capital, esa posibilidad para el capital de organizar a escala universal el ciclo de valorización, está acompañada por una situación que permite poner en competencia entre sí a los trabajadores de todos los países. Es decir, se sustenta en el hecho que el ejército industrial de reserva es realmente mundial y que es el capital como un todo el que rige los flujos de integración o de repulsión, en las formas estudiadas por Marx.

Este es entonces el marco general de un proceso de "producción para la producción" en condiciones en que la posibilidad para la humanidad y las masas del mundo de acceder a esa producción es totalmente limitada... y por lo tanto, el cierre exitoso del ciclo de valorización del capital, para el capital en su conjunto, y para cada capital en particular, se hace cada vez más difícil. Y por eso se incrementan y se hacen más determinantes en el mercado mundial "las leyes ciegas de la competencia". Los bancos centrales y los gobiernos pueden proclamar que acordarán entre sí y colaborarán para impedir la crisis, pero no creo que se pueda introducir la cooperación en el espacio mundial convertido en escenario de una tremenda competencia entre capitales. Y ahora, la competencia entre capitales va mucho más allá de las relaciones entre los capitales de las partes más antiguas y más desarrolladas del sistema mundial con los sectores menos desarrollados desde el punto de vista capitalista. Porque bajo formas particulares e incluso muy parasitarias, en el marco mundial se han dado procesos de centralización del capital por fuera del marco tradicional de los centros imperialistas: en relación con ellos, pero en condiciones que también introducen algo totalmente nuevo en el marco mundial.

Durante los últimos quince años, y en particular durante la última etapa, se han desarrollado, en determinados puntos del sistema, grupos industriales capaces de integrarse como socios de pleno derecho en los oligopolios mundiales. Tanto en la India como en China se han conformado verdaderos y fuertes grupos económicos capitalistas. Y en el plano financiero, como expresión del rentismo y del parasitismo puro, los llamados Fondos Soberanos se han convertido en importantes puntos de centralización del capital bajo la forma dinero, que no son meros satélites de los Estados Unidos, tienen estrategias y dinámicas propias y modifican de muchas maneras las relaciones geopolíticas de los puntos clave en que la vida del capital se hace y se hará.

Por eso, otro elemento a tener en cuenta es que esta crisis tiene como otra de sus dimensiones la de marcar el fin de la etapa en que los Estados Unidos pudieron actuar como potencia mundial sin parangón... En mi opinión, hemos salido del momento que analizara István Mészáros en su libro Más allá del Capital, (2001), y los Estados Unidos serán sometidos a prueba: en un plazo temporal muy corto, todas sus relaciones mundiales se han modificado y deberá, en el mejor de los casos, renegociar y reordenar todas sus relaciones en base al hecho de que deberán compartir el poder. Y esto, por supuesto, es algo que nunca se produjo de forma pacífica en la historia del capital... Entonces, primer elemento: uno de los métodos elegidos por el capital para superar sus límites se ha transformado en fuente de nuevas tensiones, conflictos y contradicciones, indicando que una nueva etapa histórica se abrirá paso a través de esta crisis.

Creación incontrolada de capital ficticio

El segundo medio utilizado para superar los limites para el capital de las economías centrales fue que todas ellas recurrieron a la creación de formas totalmente artificiales de ampliación de la demanda efectiva, las que, sumándose a otras formas de creación de capital ficticio, generaron las condiciones para la crisis financiera que se está desarrollando hoy. En el artículo que los compañeros de Herramienta tuvieron la gentileza de traducir al castellano y publicar,[3] abordé con cierto detenimiento esta cuestión del capital ficticio y los nuevos procesos que se han dado dentro del proceso mismo de acumulación de capital ficticio. Para Marx, el capital ficticio es la acumulación de títulos que son "sombra de inversiones" ya hechas pero que, como títulos de bonos y de acciones aparecen con el aspecto de capital a sus poseedores. No lo son para el sistema como un todo, para el proceso de acumulación, pero sí lo son para sus poseedores y, en condiciones normales de cierre de los procesos de valorización del capital, rinden a sus poseedores dividendos e intereses. Pero su carácter ficticio se revela en situaciones de crisis. Cuando sobrevienen crisis de sobreproducción, quiebra de empresas, etcétera, se advierte que ese capital no existía... por eso también puede leerse a veces en los periódicos que tal o cual cantidad de capital "desapareció" en algún sacudón bursátil: esas sumas nunca habían existido como capital propiamente dicho, a pesar de que, para los poseedores de esas acciones, representaban títulos que daban derecho a dividendos e intereses, a percibir ganancias…

Por supuesto, uno de los grandes problemas de hoy es que en muchísimos países los sistemas de jubilación están basados en capital ficticio, con pretensiones de participación en los resultados de una producción capitalista que puede desaparecer en momentos de crisis. Toda la etapa de la liberalización y globalización financiera de las décadas de los ochenta y los noventa estuvo basada en acumulación de capital ficticio, sobre todo en manos de Fondos de inversión, Fondos de pensiones, Fondos financieros... Y la gran novedad desde finales o mediados de los años 90 y a todo lo largo de la primera década del siglo XXI fue, en los Estados Unidos y en Gran Bretaña en particular, el empuje extraordinario que se dio a la creación de capital ficticio en la forma de crédito. De crédito a empresas, pero también y sobre todo de créditos a los hogares, créditos al consumo y más que nada créditos hipotecarios. Y eso hizo dar un salto en la masa de capital ficticio creado, originando formas aún más agudas de vulnerabilidad y fragilidad, incluso frente a choques menores, incluso frente a episodios absolutamente predecibles. Por ejemplo, en base a todo lo estudiado anteriormente, se sabía que un boom inmobiliario se termina, que inexorablemente hay un momento en el que, por procesos internos muy bien estudiados, se acaba; y si puede ser relativamente comprensible que en el mercado accionario existiera la ilusión de que no había límites para la suba en el precio de las acciones, en base a toda la historia previa se sabía que eso no podía ocurrir en el sector inmobiliario: cuando se trata de edificios y casas es inevitable que llegue el momento en que el boom acaba. Pero se colocaron en tal situación de dependencia que ese acontecimiento completamente normal y previsible se transformó en una crisis tremenda. Porque a todo lo que ya dije, se añadió el hecho de que durante los dos últimos años los préstamos se hacían a hogares que no tenían la menor posibilidad de pagar. Y además, todo eso se combino con las nuevas "técnicas" financieras que traté de explicar con un grado aceptable de vulgarización en mi artículo de Herramienta, permitiéndose así que los bancos vendieran bonos en condiciones tales que nadie podía saber exactamente qué estaba comprando… hasta el fuerte estallido de los "subprime", en 2007.

Ahora están en el proceso de desmontaje de ese proceso. Pero dentro de ese desmontaje hay procesos de concentración del capital financiero. Cuando el Bank of America compra Merrill Lynch, estamos ante un proceso de concentración clásico. Y vemos además estos procesos de estatización de las deudas, que implican la creación inmediata de más capital ficticio. La Reserva Federal de los Estados Unidos crea más capital ficticio para mantener la ilusión de un valor del capital que está a punto de derrumbarse, con la perspectiva de tener en algún momento dado la posibilidad de aumentar fuertemente la presión fiscal, pero en realidad no puede hacerlo porque eso significaría el congelamiento del mercado interno y la aceleración de la crisis en tanto crisis real. Asistimos, pues, a una fuga hacia adelante que no resuelve nada. Dentro de ese proceso existe también el avance de los Fondos Soberanos que buscan modificar la repartición intercapitalista de los flujos financieros a favor de los sectores rentistas que han acumulado estos fondos. Y esto es un factor de perturbación aun mayor en el proceso.

Quiero recordar, para terminar con este punto, que ese déficit comercial de 5 puntos del PBI es lo que ha conferido a los Estados Unidos la particularidad de ser un lugar clave para la concreción del ciclo del capital en el momento de realización de la plusvalía, para el proceso capitalista en su conjunto. Enfrentados ahora a una casi inevitable retracción económica, se plantea como el gran interrogante si, en un corto lapso, la demanda interna China podrá pasar a ser el lugar que garantice ese momento de realización de la plusvalía que se daba en los Estados Unidos. La amplitud de la intervención del Tesoro es muy fuerte y logró que la contracción de la actividad en los Estados Unidos y la caída en las importaciones haya sido hasta ahora muy limitada. El problema es saber cuánto tiempo se podrá tener como único método de política económica crear más y más liquidez... ¿Será posible que no haya límites a la creación de capital ficticio bajo la forma de liquidez para mantener el valor del capital ficticio ya existente? Me parece una hipótesis demasiado optimista, y entre los mismos economistas norteamericanos, muchos lo dudan.

¿Sobreacumulación en China?

Para terminar, llegamos a la tercer manera en la cual el capital superó sus limites inmanentes, que es en definitiva la más importante de todas y plantea los interrogantes más interesantes. Me refiero a la extensión, en particular a China, de todo el sistema de relaciones sociales de producción del capitalismo. Algo que Marx mencionó en algún momento como una posibilidad, pero que sólo se hizo realidad durante los últimos años. Y se realizó en condiciones que multiplican los factores de crisis.

La acumulación del capital en China se hizo en base a procesos internos, pero también en base a algo que está perfectamente documentado, pero poco comentado: el traslado de una parte importantísima del Sector II de la economía, el sector de la producción de medios de consumo, desde los Estados Unidos hacia China. Y esto tiene mucho que ver con el grueso de los déficits norteamericanos (el déficit comercial y el fiscal), que sólo podrían revertirse por medio de una "reindustrialización" de los Estados Unidos.

Esto significa que se establecieron nuevas relaciones entre los Estados Unidos y China. No se trata ya de las relaciones de una potencia imperialista con un espacio semicolonial. Los Estados Unidos crearon relaciones de un tipo nuevo, que ahora tiene dificultades en reconocer y en asumir. En base al superávit comercial, China acumula millones y millones de dólares, que luego presta a los Estados Unidos. Una ilustración de las consecuencias que esto trae, lo tenemos con la nacionalización de esas dos entidades llamadas Fannie Mae y Freddy Mac: parece ser que la banca de China tenía el 15% de los fondos de estas entidades y le comunicó al gobierno americano que no aceptaría su desvalorización. Son relaciones internacionales de un tipo totalmente nuevo.

Pero ¿qué ocurre en el seno mismo de China? En mi artículo en Herramienta ya citado, había una sola página sobre esto, y al final, pero de alguna manera es la cuestión más decisiva para la próxima etapa de la crisis. En China se ha dado internamente un proceso de competencia entre capitales, que se combinó con procesos de competencia entre sectores del aparato político chino, y de competencia para atraer a empresas extranjeras, todo lo cual ha resultado en un proceso de creación de inmensas capacidades de producción, además de violentar a la naturaleza en una escala grandísima: en China se concentra una sobreacumulación de capital que en un momento dado se tornará insostenible. En Europa es evidente la tendencia a una aceleración de la destrucción de capacidades productivas y de puestos de trabajo, para trasladarse al único paraíso del mundo capitalista que hoy es China. Considero que este traslado de capitales a China ha significado una reversión de procesos anteriores hacia un alza de la composición orgánica del capital. La acumulación es intensiva en medios de producción y es intensiva y muy dilapidadora de la otra parte del capital constante, es decir las materias primas. La masiva creación de capacidades de producción en el Sector I estuvo acompañada por todos los mecanismos y el empuje económico que caracteriza el crecimiento de China, pero el mercado final para sostener toda esa producción es el mercado mundial, y una retracción de éste pondrá en evidencia esa sobreacumulación de capital. Alguien como Aglietta, que ha estudiado específicamente esto, afirma que realmente hay sobreacumulación, hay un acelerado proceso de creación de capacidad productiva en China, un proceso que, en el momento en que se termine -y tiene que terminar- la realización de toda esa producción va a plantear problemas. Además, China es realmente un lugar decisivo, porque incluso pequeñas variaciones en su economía determinan la coyuntura de otros muchos países en el mundo. Fue suficiente que la demanda china de bienes de inversión cayera un poco para que Alemania perdiera exportaciones y entrara en recesión. Las "pequeñas oscilaciones" en China tienen repercusiones fuertísimas en otros lugares, como debería ser evidente para el caso de la Argentina.

Para seguir pensando y discutiendo

Y vuelvo a lo que decía en el comienzo. Aunque sean comparables, las fases de esta crisis van a ser distintas a las del 29, porque en aquel entonces la crisis de sobreproducción de los Estados Unidos se verificó desde los primeros momentos. Después se profundizó, pero se supo enseguida que se estaba ante una crisis de sobreproducción. Ahora, en cambio, con diversas políticas están aplazando ese momento, pero no podrán hacerlo mucho más. Simultáneamente, y como ocurriera también con la crisis de 1929 y los años treinta, aunque en condiciones y bajo formas distintas, la crisis se combinará con la necesidad, para el capitalismo, de una reorganización total de la expresión de sus relaciones de fuerzas económicas en el marco mundial, marcando el momento en el que los Estados Unidos verán que su superioridad militar es solamente un elemento, y un elemento bastante subordinado, para renegociar sus relaciones con China y otras partes del mundo. O llegará el momento en el cual dará el salto a una aventura militar de imprevisibles consecuencias.

Por todo ello, concluyo que esto es mucho más que una crisis financiera, incluso si estamos por ahora en esa fase, incluso si el artículo publicado por Herramienta debió concentrarse en tratar de iluminar los enredos del capital ficticio y permitir entender por qué es tan difícil el desmontaje de ese capital, pero estamos ante una crisis muchísimo más amplia. Ahora bien, tengo la impresión, por el tenor de las distintas preguntas u observaciones que se me hicieron, que muchos opinan que estoy pintando un escenario de tipo catastrofista, de derrumbe del capitalismo... En realidad, creo que estamos ante el riesgo de una catástrofe, pero no ya del capitalismo, sino de una catástrofe de la humanidad. En cierta forma, si tomamos en cuenta la crisis climática, posiblemente ya existe algo de eso... Yo opino (junto con Mészáros, por ejemplo, pero somos muy pocos los que damos importancia a esto) que estamos ante un peligro inminente. Lo dramático es que, por el momento, esto afecta directamente a poblaciones que no son tomadas en cuenta: lo que pueda estar pasando en Haití pareciera que no tiene la menor importancia histórica; lo que ocurre en Bangladesh no tiene peso más allá de la región afectada; tampoco lo ocurrido en Birmania, porque el control de la Junta militar impide que trascienda. Y lo mismo en China: se discuten los índices de crecimiento pero no sobre las catástrofes ambientales, porque el aparato represivo controla las informaciones sobre las mismas.

Y lo peor es que esa "opinión", que está siendo constantemente construida por los medios, está interiorizada muy profundamente, incluso en muchos intelectuales de izquierda. Yo había comenzado a trabajar y a escribir sobre todo eso, pero con el comienzo de la crisis de alguna manera debí volver a ocuparme de las finanzas, aunque no lo hago con mucho gusto, porque lo esencial me parece que se juega en un plano distinto.

Para terminar: el hecho de que todo esto ocurra después de esa tan larga fase, sin paralelo en la historia del capitalismo, de 50 años de acumulación ininterrumpida (salvo una pequeñísima ruptura en 1974/1975), así como también todo lo que los círculos capitalistas dirigentes, y en particular los bancos centrales, aprendieron de la crisis del 29, todo ello hace que la crisis avance de manera bastante lenta. Desde septiembre del año pasado, el discurso de los círculos dominantes viene sosteniendo, una y otra vez, que "lo peor ya pasó", cuando lo cierto es que, una y otra vez, "lo peor" estaba por venir. Por eso insisto en el riego de minimizar la gravedad de la situación, y sugiero que en nuestros análisis y forma de enfocar las cosas deberíamos incorporar la posibilidad, como mínimo la posibilidad, de que inadvertidamente estemos también interiorizando ese discurso de que, en definitiva "no pasa nada"...


* Exposición realizada en el encuentro organizado por Herramienta el 18 de septiembre de 2008. La desgrabación y preparación para su publicación es de Aldo Casas.

** Destacado marxista, es parte del Consejo científico de ATTAC-Francia, director de Carré rouge, y miembro del Consejo asesor de Herramienta, con la que colabora asiduamente. La finance capitaliste, último libro publicado bajo su dirección, está siendo traducido para ser publicado por Ediciones Herramienta.

[1] Carlos Marx, El capital México, FCE, 1973, Vol. III, pág. 248.

[2] Idem.

[3] "El fin de un ciclo. Alcance y rumbo de la crisis financiera", en Herramienta Nº 37,

jueves, 6 de noviembre de 2008

Reflexiones de V de Vivienda sobre convocatorias anónimas

Publicamos este texto que nos ha llegado procedente de compañeros de VdeVivienda. Creemos que es una reflexión más que pertinente de cara a las Movilizaciones convocadas para el 15 de Noviembre.
SALUD

Como V enviamos unas reflexiones sobre como trabajamos la primera convocatoria anónima por internet. Hablamos del 14 de Mayo donde no existíamos.

Otro caso similar fue el 23 de diciembre de 2007, de nuevo un mail anónimo nos forzó a decidir qué hacer, si molvilizar o no. Al final decidimos que aunque no podíamos seguir todo lo que saliera por internet sí que podíamos aprovechar la sinergia para movilizar más fuerte y sin apropiarnos de la convocatoria sí la reforzamos. Fue un día espectacular: entre 15.000 y 20.000 personas abarrotaron via laietana. Todo ello a pesar del frío, ¡y de ser fechas navideñas!

Inicios del movimiento por el derecho a la vivienda en Barcelona

1. El contexto

Hasta el año 2006 distintos grupos y colectivos de Barcelona habían trabajado sobre el tema del acceso a la vivienda con limitado éxito. Las reformas urbanísticas en algunos barrios habían suscitado movimientos vecinales en algunos casos fuertes y que llegaron a cumplir algunos de los objetivos. Sin embargo, las dificultades de acceso a un bien de primera necesidad como la vivienda no parecían tener la capacidad de movilizar o ningún colectivo había acertado en definir el problema de forma que tuviera sentido iniciar una lucha colectiva para hacer frente a la situación. Al mismo tiempo, el ciclo especulativo que se inició hacia 1996 estaba en su punto álgido: la escalada de precios era vertiginosa y no se preveía su fin inmediato. Cada semana había noticias en la prensa sobre vivienda, en general describiendo la evolución del mercado inmobiliario: tanto por ciento de aumento del precio de compra, de alquiler, de la construcción etc. La vivienda estaba en boca de todo el mundo, pero la falta de acceso a ella se percibía como un problema individual provocado por los vaivenes del mercado.

2. El mail

En el primer trimestre de 2006 circuló por Internet un mail anónimo secundado por la prensa gratuita convocando a un macrobotellón en muchas ciudades del estado. Al mismo tiempo en Francia los estudiantes secundados por organizaciones de todo tipo plantaban cara a una reforma del mercado laboral que precarizaba su situación en el momento de acceso al trabajo. Estos dos componentes dieron pie a un nuevo cliché sobre los jóvenes españoles: mientras los del país de al lado luchas por sus derechos aquí nos dedicamos a promocionar el botellón. Por estas fechas un mail anónimo recogió estos elementos y les dio la vuelta: En Francia, los jóvenes protestan por la "modificación" de los contratos basura. Muchas voces han sido las que se han quejado en este país porque los jóvenes no hacían nada. Pues bien, ¿se lo vamos a demostrar? El domingo, 14 de Mayo, sentada. Queremos todos una vivienda digna, una vivienda en la que podamos vivir y fundar nuestras familias sin estar destinando más del 50% de nuestro sueldo para pagarla. Si de verdad te importa tu futuro, ¿estarás allí sentado con tus colegas?

Es una buena oportunidad para ver que la Red sirve para convocatorias mucho más útiles que las del botellón, también para comprobar si los medios le prestan la misma atención que a éstas y sobre todo, para denunciar la indecencia de constructores que te piden 50.000 euros bajo manga y políticos que cierran los ojos para llevarse lo suyo, por citar algunos. Esta convocatoria no ha sido convocada por ningún partido político, simplemente es la demostración de como la juventud española puede unirse para conseguir sus propósitos.

Puerta del Sol en Madrid, Plaça de Catalunya en Barcelona y las plazas más representativas de cada ciudad son el lugar. Estas son las citas. El correo electrónico circuló masivamente. De nuevo la prensa gratuita difundió y probablemente le dio credibilidad a la convocatoria.

3. El 14 de mayo

El día 14 de mayo se celebraron sentadas en numerosos pueblos y ciudades. En Barcelona unas 2000 personas se concentraron en Plaça Catalunya y permanecieron en la plaza durante unas dos horas. Algunos de los asistentes llevaban consigo pancartas con distintas consignas y se corearon lemas, pero el tono general de la protesta más que la euforia rozó en algún momento el aburrimiento bajo un calor importante. La convocatoria cogió por sorpresa a los colectivos sociales de Barcelona preocupados por la vivienda. Muchos de ellos se acercaron a la sentada del 14 de mayo y actuaron de distintas formas:

- Llevando pancartas y materiales ya hechos, dando su visión sobre el problema
- Llevando dispositivos o cosas para dar visibilidad a su colectivo y ofrecer una foto (por ejemplo llevando una casita de cartón)
- Aportando herramientas que dieran algo que hacer y posibilitaran dar continuidad al incipiente movimiento pero sin condicionarlo

En mi opinión, la tercera opción fue de lejos la más interesante.

4. El debate sobre cómo intervenir

Las semanas antes del 14 de mayo hubo dos reuniones que yo recuerde en las que participaron gente del Taller contra la Violencia Inmobiliaria y Urbanística, Miles de Vivienda, la Promoció d'Habitatge Realment Públic, Infoespai, Conservas, exAgencias y otros. Era gente que llevaba años trabajando sobre el tema de la vivienda y que tenía discursos potentes sobre este tema. Sin embargo se vio muy clara la necesidad de no imponer ningún discurso ni llevar hablado qué se debía hacer exactamente, sino mantenerse en un segundo plano y aportar herramientas útiles.

El argumento principal es que una convocatoria hecha circular a través de Internet tenía una autonomía propia que trascendía los círculos activistas, quienes no tenían legitimidad para apropiársela como una acción propia cuando realmente no lo era. Respetar un proceso de movilización de estas características significaba también no llevar reivindicaciones prefabricadas, ni acaparar atención, marcar los contenidos o dar declaraciones. Los asistentes a la concentración con toda seguridad no se verían reconocidos en unos contenidos impuestos, sino que muchos habían ido a la concentración porque se vieron reconocidos en el tono apartidista y espontáneo del correo. Existía el riesgo de espantar a las personas no politizadas y que no viéndose reconocidos se fueran por donde habían venido. Este riesgo debía ser evitado. El objetivo de una movilización incipiente siempre debe ser iniciar nuevos procesos de politización, sumar en vez de quedarnos viéndonos las caras los mismos de siempre. Una manera de concretar esta idea es ofrecer herramientas organizativas, aportar aquello que sabemos hacer los activistas.

5. Las herramientas

Las herramientas que se aportaron fueron:

- Una mesa de recogida de correos electrónicos para que quien quisiera pudiera apuntarse y seguir en contacto después de la concentración. Se recogieron unas 200 direcciones
- Un enorme rollo de pancarta en blanco y tintas de colores en el que los asistentes escribieron todo tipo de consignas
- Difusión de una convocatoria a una asamblea abierta para ver cómo se continuaba con la protesta para el siguiente sábado por la tarde en la Plaça del Rei

6. Continuidad

La sentada tuvo continuidad y se convirtió en un movimiento seguramente en parte por estas aportaciones. Con las direcciones recogidas el 14 de mayo se formó una lista de correo en la que se planteó el debate de qué otras acciones hacer. Al cabo de unos días era obvio que esta herramienta no servía debido a la avalancha de correos que saturaba los buzones. Rápidamente los debates fueron trasladados al foro creado el 24 de mayo http://vdevivienda.todaviapordeterminar.com/ que más tarde migraría a http://vdevivienda.megaslibres.com/ y ahora es http://foro.vdevivienda.net/. El sábado del fin de semana siguiente se celebró una pequeña asamblea en la Plaça del Rei de Barcelona y el domingo hubo una segunda sentada. Esta dinámica de asambleas al aire libre y sentadas se mantuvo unas semanas. Luego se redujo el número de asistentes y se vio que hacía falta cambiar de estrategia. La siguiente etapa comenzó con la convocatoria de una manifestación para el día 2 de julio.

domingo, 2 de noviembre de 2008

Elogio de la Caída

Desde Guayaquil, su autor ha tenido la amabilidad de enviarnos el texto que a continuación publicamos, y que apareció como artículo editorial en la edición escrita del Diario El Telégrafo (Ecuador), del 02 noviembre 2008.

Elogio de la caída

Marcelo Medrano
Columnista

Cuando leo y escucho sobre la desazón debida a la crisis financiera, no puedo dejar de sonreír. ¡Sí!: miro las imágenes de rostros desencajados y manos crispadas de aquellas mafias de Wall Street, y de sus acólitos y sirvientes nacionales, y no dejo de sonreírme. Pero, con la suspicacia de la vida aprendida tras duros golpes, ‘usted es medio malvado’, me dice, porque ‘esa crisis nos afectará a todos’. ¡Imagine!, ya viene la navidad y parece que será muy triste.

Mmmm, aunque intento entristecerme con su argumento sobre el origen de tan triste tristeza, no puedo dejar de sonreír. Permítame: los seres humanos establecemos muchas formas de relación en sociedad; una de ellas, la económica, nos atraviesa con toda su fuerza material y configura, de múltiples y complejas maneras, nuestras subjetividades: son nuestras formas de ver y estar en el mundo. Usted, afligido pero estimado lector, mantiene, defiende, disfruta, exige maneras de vida económica. La actual crisis capitalista, entonces, se llena y desborda de angustia porque le obliga a mirarla y sentirla como restricción del consumo. El temor que se convierte en congoja y abatimiento es ese: limitar su disfrute del consumo. Gran parte de la propaganda gira en ubicar a los seres humanos como consumidores: más gastos, más compras, significan más felicidad. ¿No me diga que usted piensa en ser feliz de esa manera? En época de crisis: menos compras, menos gastos, significarían menos felicidad, y es también crisis de una subjetividad y una sensibilidad dominadas por la psicología de la tarjeta de crédito… ¿y eso le entristece? ¡No sea tan malvado!

Pero, hay algo más fundamental que sí le afecta. Cuando vive su vida económica, un conjunto de relaciones sociales básicas le atraviesan y condicionan. Usted, como dueño de una capacidad para producir y como ejecutor de la producción, dota de sentido a lo que genera y crea. Pero, dentro del sistema capitalista, ese sentido es arrebatado, alejándolo de su origen, de usted. Cualquier mercancía que le entristece no comprar, ha sido despojada de ese sentido creador y refleja una relación social en permanente crisis. Los aprietos del sistema financiero internacional reviven, entonces, esos conflictos aparentemente superados, pues visibilizan lo que usted y miles de millones más efectivamente producen, aunque la especulación se encargue de inventar valores con cada operación financiera realizada… gigantescos valores inexistentes que se han evaporado.

Si algo me permite sonreír es ese ‘retorno’ a la materialidad, ese ‘regreso’ de la mirada hacia quienes producen aquella materialidad. Aunque, no se confunda: sé que la crisis la pagaremos los países y sectores menos favorecidos. Y el golpe será fuerte. Sin embargo, hemos aterrizado nuevamente desde la esfera especulativa en la esfera productiva. Y esa es la tristeza de Wall Street, que no tiene porqué ser la suya, amigo lector. Hoy, soy sonrisa, pero no aquella nacida de la contemplación de la caída, sino aquella comprometida, de raíz, con esa caída. Siempre.